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Esta fue la extraña petición que intentó frenar el estreno de Spider-Man de Sam Raimi

Sony Pictures

A principios de los años 2000, un grupo de fans de los cómics creó una curiosa petición para frenar el estreno de Spider-Man, de Sam Raimi.

Sin duda alguna, la primera trilogía de Spider-Man es uno de los pilares fundamentales de lo que hoy es el cine hollywoodense, especialmente aquel que toma prestadas historias de los cómics para desarrollarlas en la pantalla grande. Sin embargo, no todos vieron con buenos ojos el proyecto dirigido por Sam Raimi y protagonizado por Tobey Maguire. De hecho, hubo algunos fans que incluso levantaron una petición para frenar el estreno de Spider-Man por una razón tan curiosa como apasionada. Aquí la historia.

Una propuesta que comenzaba a sonar mal

En enero de 2000, Sony Pictures anunció la producción de uno de los títulos más importantes en la historia de la compañía: una adaptación del famoso cómic Spider-Man de Marvel a cargo del director Sam Raimi. La película, primera ocasión en la que Peter Parker y su alter ego heroico El Hombre Araña aparecerían en la pantalla grande, prometía retomar la historia y personajes creados por Stan Lee y Steve Ditko y darles un giro épico.

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Por desgracia, algunos seguidores se sintieron decepcionados cuando una versión del guion se filtró a la prensa y se reportó que el amigable vecino neoyorquino no utilizaría lanza redes mecánicos como en los cómics, sino que sus telarañas saldrían orgánicamente de sus muñecas. Era una traición al personaje que algunos no estaban dispuestos a tolerar.

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Mientras la película se preparaba para iniciar su rodaje, fanáticos se organizaron para pedir a Raimi que reconsiderara su decisión. Incluso reunieron firmas y publicaron una página web (www.no-organic-webshooters.com) donde expusieron su molestia y amenazaron con extender sus quejas a Marvel y Sony.

La extraña petición que intentó frenar el estreno de Spider-Man de Sam Raimi

Entre 2000 y mediados de 2001, más de 5 mil personas apoyaron la insólita petición en contra de la primera entrega de Spider-Man. En el documento, titulado apropiadamente “Ayúdanos a salvar a Spider-Man”, los firmantes explicaron que la cinta había “abandonado una tradición de 37 años de ficción existente” con su “decisión de que lanzar redes fuera un efecto secundario de la mordida de una araña radioactiva que causó los sorprendentes poderes del personaje”.

“Básicamente, serían glándulas mutadas recientemente desarrolladas ubicadas en su muñeca capaces de producir telarañas como las generadas por arácnidos. Esto contrasta directamente con la historia extraordinariamente exitosa y bien recibida de su origen, pues Peter Parker creó los webshooters a partir de su propio genio“, se leía en la página.

No Organic WebShooters

“Los disparadores de telarañas mecánicos son un testimonio de la brillantez de Peter Parker como científico. Pudo crear la fórmula del generador y su mecánica. Esto dice mucho del tipo de héroe que es y amplifica uno de los atributos principales de su personalidad: su genio“.

Así fue como Spider-Man terminó con lanza redes orgánicos

Cabe destacar que la idea de deshacerse de los lanza redes mecánicos no era una propuesta original de Sam Raimi, pues esta provenía de un borrador de guion que James Cameron trabajó para Marvel a mediados de los 90. De hecho, en un primer vistazo a la cinta presentado en la Electronic Entertainment Expo de 2001 se pudo ver a Parker (interpretado por Tobey Maguire) disparar telarañas de lo que parecía ser un dispositivo tecnológico. Aunque el metraje dio tranquilidad a aquellos que se habían levantado en internet, el corte final de la película olvidó la invención.

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“Cuando los fans se enteraron de que iba a hacer eso, trataron de sacarme del proyecto“, dijo Raimi a Variety en 2022. “Estaba al tanto (de las protestas) y no era algo bueno para mí. No tuve una experiencia muy buena con los fans“.

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Por suerte, la primera aventura cinematográfica de Spider-Man fue todo un éxito, tanto en taquilla (con más de $800 millones de dólares recaudados en todo el mundo) como en crítica. Los fans también recibieron con beneplácito a la cinta, a pesar del polémico cambio. Con el tiempo, el pleito entre los fans acérrimos y el responsable del filme de 2002 fue relajándose hasta convertirse en un idilio que hoy, más de 20 años después del estreno de Spider-Man, continúa.